nunca es tarde

Un día cualquiera me levanto y miro el móvil. No puedo vivir sin él. Espero que el tiempo pase y que llegue el invierno, la navidad. Mientras tanto trato de aprovechar cada momento, cada día. Intento descubrir cosas nuevas en el interior. Y mientras tanto canto, "no, no, no, no me enseñes la lección que no tengo ganas de aprenderlo todo".
Me he comprado unas horquillas para ordenar mi pelo. Si no usas horquillas puede que el pelo se suelte y se enrede por el jardín.
Es bonito ir a un concierto de La Costa Brava y disfrutar como una enana. Bailar como la que más y cantar hasta los puntos y las comas. Aprovechar hasta el último desafine de Sergio para pegar un brinco. Vitalidad y alegría de vivir que no todos los perros tienen.
Puede que nunca ganemos un mundial, pero es que no lo queremos ganar. Yo sólo quiero ser feliz, quizá en ese camino no entre ganar la copa del mundo. Eso sí, quiero ser el escarabajo más grande de Europa.
Los clásicos serán siempre modernos.