Todas las mañanas cuando salgo del metro hay un chico que reparte en silencio hojas de un mago-chamán. El primer día le cogí, pero ahora ya le digo que no. Hoy le ha aparecido una competidora muy potente. Era una mujer un tanto altanera que entre palabras chilladas, muy despierta para las horas que eran, repartía unos papeles que ponía "Atención Psicológica Psicoterapia".
Hoy le he cogido uno, mañana ya no lo haré.
jueves, noviembre 29, 2007
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Tambien he sufrido el incomodo acos de los repartidores de folletos, panfletos y hojillas. Incómodo por saber que ellos se "juegan la vida" en ello y a ti no te interesa nada de lo que ofrecen. Pero no olvides sonreirles y mirarles a la cara cuando les digas "no, gracias, ya tengo..". Tambien son como tú, como yo...
Hola, lo del vertedero de Sao Paulo me lo dices a mi????,........, saludos
Publicar un comentario